“Es común que los pacientes y sus parejas experimenten dudas y temores al querer retomar su vida sexual luego de un evento cardíaco. Es por eso que es importante abordarlo con información clara, precisa y confiable” comenta el doctor Mario Boskis*, reconocido cardiólogo.
“La actividad sexual es un componente importante que hace a una buena calidad de vida, pero muchas personas tienen temor a que al volver a tener relaciones, se puedan desencadenar síntomas como palpitaciones o angina de pecho. Otros pacientes, peor aún, presentan cuadros de ansiedad y depresión ante la idea, muchas veces infundada, que volver a retomar una vida sexual plena pueda gatillar un nuevo Infarto de Miocardio o hasta una Muerte Súbita. Muchas veces estos sentimientos no se externalizan, generando hasta disfunción sexual. Sin duda, es tarea del profesional, el poder abordar el tema con su paciente (y pareja idealmente) para evacuar dudas y temores” explica el especialista.
Los estudios iniciales en la década del 50’ llevados a cabo por los sexologos Masters y Johnson, arrojaron mucha información sobre la anatomía y fisiología de la respuesta sexual humana. Sin embargo, en los últimos años, nueva evidencia permitió que se pueda estudiar en situaciones menos estructuradas, con dispositivos domiciliarios, que sucedía fisiológicamente durante el acto sexual con el sistema cardiovascular.
Se determinó que durante el acto sexual, incluido el orgasmo, se podía subir la frecuencia cardiaca y la presión arterial a valores cercanos a lo que podrían ser una actividad física similar a caminar en una cinta a 6 km/h. Estudios posteriores publicados en la década del 90’ determinaron que el riesgo absoluto de desencadenar un infarto luego de la actividad sexual es extremadamente bajo, aun en pacientes con antecedentes coronarios, siempre y cuando el cuadro esté controlado
Es por ello que cuando el paciente entra en un plan de rehabilitación cardiovascular, debemos estratificar su riesgo, estableciendo en base a sus antecedentes, su estado físico actual, su edad y síntomas o ausencia de ellos, un protocolo de estudio que muchas veces implica una ergometría o un eco stress, a fin de intentar detectar si existe isquemia residual, síntomas inducidos por el esfuerzo y la real capacidad funcional cardiovascular.
A partir de ahí, surgen las recomendaciones de como, cuando y cuanto y la prescripción que siempre debe ser personalizada, ya que pueden variar de acuerdo al sexo/género, la edad y los antecedentes previos. También es muy importante tener en cuenta que ciertos medicamentos pueden alterar la calidad de la erección, por lo que muchas veces es necesario la consulta con un sexólogo que evaluará la necesidad de tratamiento farmacológico adicional para mejorar la calidad del acto sexual.
“Es importante brindar la confianza necesaria para que puedan retomar una vida sexual plena y saludable después de un evento cardíaco“, concluye Boskis.
5 Tips antes de retomar la actividad sexual:
- Consultar siempre sus dudas o temores con el profesional acerca de posibles riesgos que pueda sufrir.
- Si su médico lo autorizó es importante que previamente haya practicado algo de actividad física, para ver qué le dice su cuerpo.
- Consulte si los medicamentos que le prescribieron pueden influir en la esfera sexual.
- Consulte si usted sería candidato a poder tomar medicamentos tales como el sildenafil o derivados.
- Hable con su pareja acerca de los miedos o temores que pueda tener y juntos evacuen dudas acerca de qué puede ser riesgoso para ambos en esta nueva etapa.
*Mario Boskis (MN 74002) Cardiólogo. Comunicador en temas de salud. Miembro Titular de la Sociedad Argentina de Cardiología (MTSAC). Coordinador de los consejos científicos de la SAC. Director General del Instituto Cardiovascular San Isidro (ICSI) del Sanatorio Las Lomas en Buenos Aires y del Grupo Cardiológico Boskis.