Muchos fueron al gimnasio hasta el último día que pudieron. Otros ya habían decidido abandonar el entrenamiento en lugares cerrados, con gente, y sumarse al running en la calle. A partir de hoy, ya no se puede ni una cosa ni la otra. Salir a correr o hacer la rutina en la plaza, al aire libre, no son excepciones contempladas en la cuarentena obligatoria anunciada ayer por el coronavirus. Con el aislamiento social, obligatorio y preventivo que fue dispuesto por el gobierno nacional, un nuevo hashtag se sumó a la pelea contra el coronavirus: #Yoentrenoencasa . Las fotos y los videos ya comenzaron a circular por las redes.

Fiorella Chirkes va al gimnasio cuatro veces por semana. Iba, mejor dicho. Hasta la semana pasada, seguía con las clases de entrenamiento funcional en un centro de fitness a la vuelta de su casa. Pero desde que las clases se suspendieron y sus tres hijas dejaron de ir al colegio, ella también se confinó al encierro. “Compramos por Mercado Libre una TRX [una especie de arnés sujeto por un punto de anclaje fabricado de distintos materiales y diseñado para hacer ejercicios en suspensión, con el peso del propio cuerpo], lo colgamos en la terraza con un gancho y empecé a entrenar -cuenta Fiorella-. Tengo un aislante de bolsa de dormir que lo uso como un mat de yoga, dos pesitas y una soga. Para algunos ejercicios, si hace falta, también uso una silla y el palo de escoba para hacer sentadillas, para mantener mejor la postura”.

El gimnasio al que va en Villa Urquiza, BE Functional Training Center, les manda a sus alumnos por Instagram todos los días una rutina diferente con una serie de ejercicios por repetición. Y aunque Fiorella asegura que no es lo mismo que ir a la clase y entrenar en grupo, moverse en su casa le hace bien. “También para mi salud mental. Todos estamos muy conscientes de la importancia del aislamiento social; por eso más que nunca necesito descargar un poco de energía y aflojar tensiones”.

Francisca y Josefina Bauzá entrenan en casa Fuente: LA NACION

Seguir con la actividad física para quienes están acostumbrados a entrenar todos los días, o incluirlas a partir de ahora en la rutina diaria de aislamiento de los más sedentarios, tiene varios beneficios según los expertos. No solo es importante para mantenerse en forma y cuidar la salud física, es clave también para preservar la salud emocional en medio del confinamiento.

Bailar con la música a todo nivel

“Es difícil mantener un estilo de vida activo en tiempos de cuarentena -reconoce el cardiólogo Mario Boskis, miembro de la Sociedad Argentina de Cardiología-. Las recomendaciones internacionales dicen que deberíamos ejercitar unos 150 minutos por semana en una actividad física moderada, y dos veces por semana un entrenamiento muscular. Recluidos en casa se complica, sobre todo a las personas mayores que no están familiarizadas con las rutinas deportivas ni tienen en casa una cinta o bicicleta fija. Podemos poner la música que nos gusta, por ejemplo, y caminar rápido por la casa en tres intervalos de diez minutos cada uno; o bailar durante media hora. La clave es no quedarse frente al televisor todo el día”.

Fiorella Chirkes entrena en su terraza Fuente: LA NACION

Boskis, además, señala que en eventos que afectan a toda una población, como puede ser una pandemia, un terremoto o una guerra, el estrés provocado por este tipo de situaciones puede disparar eventos cardiovasculares, o empeorar una insuficiencia cardíaca existente. Sostiene que hay varias publicaciones científicas que han estudiado el tema, y que está comprobado que el ejercicio físico es un gran canalizador del estrés. “Mantenerse activo en este momento es una prescripción médica, tan importante como un medicamento”, cierra el experto.

Para los que están en cuarentena con la familia, uno de los consejos es compartir la actividad física entre todos. Es un buen plan para integrar a todos los integrantes de la casa y para sumar un momento lúdico de conexión entre padres e hijos. Además, los chicos necesitan gastar energía, y durante el encierro suelen volverse más demandantes.

Los Bauzá implementaron una rutina familiar guiada por sus hijas. Francisca, de 12 años, replica el entrenamiento de sus clases de comedia musical. Josefina, de 9 años, recibe vía Instagram TV los ejercicios que le manda su profesora de cestobal, y ahora los hacen todos. “Es un momento divertido. Hacemos ejercicio y la pasamos bien los cuatro. Lo hacemos antes de cenar, como para no sentirnos tan mal cuando nos sentamos por décima vez a la mesa durante el día”, cuenta Florencia Bauzá, diseñadora gráfica y una de las socias de la marca Enamorada del Muro, que debió cerrar su local a la calle en Belgrano.

Deporte a nivel competitivo

Julián Gómez es entrenador de vóley de varios equipos femeninos del Club Ciudad de Buenos Aires, que juegan la liga inferior del torneo metropolitano. Todos los días, sus jugadoras de 13 y 14 años reciben sus videos. “Los objetivos son varios. Por un lado, que las chicas no pierdan el estado físico. Después agregamos algunos ejercicios con pelota, sencillos, teniendo en cuenta que algunas pueden tener un patio, balcón o terraza, pero otras no. La propuesta es también para motivarlas, que se saquen el pijama, se pongan las zapatillas y la ropa del club y sientan que de alguna manera siguen entrenando”.

Para Pablo Patak, docente de la facultad de Motricidad y Deportes de la UAI y coordinador de los preparadores físicos de juveniles e inferiores de UAI Urquiza, en una situación como la actual, una rutina de ejercicio para un deportista tiene como objetivo perder el menor rendimiento posible. “Pero estos trabajos no representan el nivel de cargas reales que alcanzamos en un campo de entrenamiento. Dependiendo del deporte, se pueden hacer ejercicios de coordinación, entrenamiento funcional y flexibilidad”, explica.

Apps y videos para bajar en el celular

Hay instagrammers, videos y apps que en este momento son furor en las redes. Aunque no haya colchonetas ni pesas en casa, se puede hacer actividad física guiados por un personal trainer. Gimnasios, facultades y referentes del mundo fitness que comparten sus rutinas online. También, muchas de las marcas que tenían contenidos pagos los abrieron al público en general, y gratis, hasta el 1° de abril. Nike, Adidas y Under Armour tienen aplicaciones que se pueden descargar con distintos ejercicios que incluyen fuerza, velocidad, resistencia, yoga y hasta boxeo.

Las universidades también se sumaron a la movida. La UADE realizó varios videos que se pueden en su cuenta de Instagram para hacer una rutina básica en casa. La empresa norteamericana Down Dog también decidió liberar todas sus apps de fitness y yoga hasta que termine la cuarentena. “Creemos que los momentos estresantes como estos son precisamente cuando la gente necesita prácticas que favorezcan su bienestar. Estamos comprometidos a hacer nuestro aporte”, dijeron en un comunicado.